El problema de la repostería sin gluten es que no siempre se consigue que quede todo lo jugosa que uno desea. Son harinas que tardan en hidratarse y aumentar la cantidad de aceite no me parece una buena solución. Con este bizcocho, mal esta que yo lo diga, creo que me he lucido. Queda realmente muy jugoso y sabroso. Seguramente debido a que lleva no sólo zumo de naranja, sino la naranja entera lo que le aporta mayor sabor, jugosidad y textura. Os cuento.
Lo primero que haremos será "confitar" dos naranjas. Para ello, lavamos bien las naranjas y sin pelarlas la partimos en rodajas no muy gruesas. Añadimos un vaso de agua y como la mitad de azúcar.
Dejamos cocer a fuego lento durante tres cuartos de hora y después trituramos con la batidora. Reservamos.
Dejamos cocer a fuego lento durante tres cuartos de hora y después trituramos con la batidora. Reservamos.
Este es el aspecto con el que os debe quedar tras triturarlo |
Ahora batimos bien tres huevos. Añadimos 200 gramos de azúcar y continuamos batiendo. Añadimos un yogurt natural y batimos de nuevo.
Batimos bien y añadimos 100 gramos de aceite de girasol.
Continuamos batiendo unos 5 minutos. Para finalizar agregamos a esta masa las naranjas confitadas que habíamos triturado. Esta vez lo mezclaremos sólo con ayuda de un tenedor ya que no queremos perder la textura que aporta los trocitos de naranja.
Precalentamos el horno a 180ºC . Enharinamos el molde y vertemos la masa de bizcocho. Introducimos en el horno unos 30 minutos. Pasado ese tiempo retiramos y dejamos enfriar antes de desmoldar
¡¡Que ricooo!!.. Me parece buenísima idea lo de añadir las naranjas confitadas trituradas. Lo probaré.
ResponderEliminarGracias Pikerita. No dejes de probarlo queda muy muy jugoso
ResponderEliminar